Estelles y Rodríguez Gurruchaga, una dupla que hace crecer a Atlético.
Estelles y Rodríguez Gurruchaga, una dupla que hace crecer a Atlético.
Por Tomás Fontana
Scrum.com
BUENOS AIRES– El 2014 no tuvo los resultados esperados por Atlético del Rosario. El haber quedado fuera del Nacional de Clubes marcó claramente una derrota anímica y el incumplimiento de un objetivo que hubiese modificado los planes de este nuevo año. Pero eso ya quedó en el pasado. Ahora los de Plaza Jewell respiran otro aire, sumaron su cuarta victoria consecutiva en el Torneo de la URBA Copa DIRECTV y mantienen un buen panorama de cara al futuro. Pero los resultados no son casualidad, sino causalidad. Y uno de ellos es sin duda la recuperación de Martín Rodríguez Gurruchaga y la dupla que conforma con el capitán, Juan Pablo Estelles. Dinamismo, entendimiento, calidad y sincronismo. Todos los adjetivos describen a la pareja que maneja un equipo que crece semana a semana.
Con el catálogo de “experimentados” Rodríguez Gurruchaga y Estelles suman la aptitud y diferencia que Atlético del Rosario necesita. Con un clima distendido, con risas y bromas en todo momento, Scrum juntó a la dupla de centros y habló de la potencialidad que representa el uno para el otro. Además, hubo pases de facturas por la falta de regalos desde la vuelta de Rodríguez Gurruchaga de Francia y un análisis del proceso que atraviesa el club de sus amores.
– ¿Cómo clasifican esta dupla y en qué los ayudo el acoplarse con el otro?
– Estelles: Al Nippon lo conozco toda la vida del club y es un gran amigo. Siempre me da mucha confianza que esté al lado mío. Además, sé que cada vez que me mande alguna él me la arregla en un segundo, je. Pero más que nada me da libertad de tomar mis tiempos, de hacer mi carrera, porque sé que los pases y las patadas van a ir donde yo quiero y donde él quiere. Así que a mí me da mucha tranquilidad.
– Después de tanto elogio tenés que decir algo de él…
– Rodríguez Gurruchaga: ¡Está on fire! Tenemos al as de espadas de Atlético del Rosario, je. Hoy le toca ser capitán del equipo, tiene una responsabilidad muy grande. Pero lo que le intento decir todos los días es que juegue como lo hizo siempre, que no se tome el papel de capitán, sino que juegue porque sino no se saca un peso importante. Es muy lindo verlo jugar porque hoy hace una diferencia muy grande por la cabeza y la mentalidad que tiene.
– ¿Y a vos en tu juego en qué te ayuda?
– RG: En tener un flaco al lado que sé que cada pase que le dé lo va a agarrar. Que sabe leer el juego que uno hace. Nos conocemos hace mucho tiempo, es lindo jugar al lado de él, pese a que jugó mucho más con mi hermano que conmigo. A un “12” que le gusta jugar un estilo tipo de apertura, que lanza el juego, se le hace todo más fácil. Es muy lindo tener un jugador como él.
– Cuando volvió de Francia y para sellar esta amistad, ¿hubo alguna remera o regalo?
– E: Un short pero porque se lo tuve que manguear y unos botines pero porque me vio que estaba usando unos viejos pero me vienen bien unos nuevos ahora, je. Hablando en serio, nosotros tuvimos la suerte de estar en muchos seleccionados y muchos equipos, por ende tuvimos el privilegio de haber tenido muchas facilidades. Por eso, siempre tratamos de ayudar a los chicos que no tuvieron esa oportunidad.
– ¿Qué cambió de la temporada pasada?
– RG: Cambió la maduración de este equipo de un año a otro. Creo que desde el partido ante el CASI del año pasado se hizo una autocrítica muy fuerte. Hubo seis meses de preparación para arrancar este torneo con un grado de maduración mayor a la del año pasado. Después, hoy te puedo decir que cambió la contundencia porque estamos ganando los partidos. Dentro de todo, hacemos el juego que queremos pero no pasa siempre. Los partidos se trabajan, cada rival es diferente y hay que adaptarse a lo que el rival quiere.
– Una de las cosas que cambió es que Ignacio Gareis te sacó las patadas…
– RG: ¡No! Nacho se quiere sacar las patadas de encima, me las quiere dar a mí y yo le digo que siga él que está metiendo todo. Yo ni siquiera me acerco a pedirle la pelota, porque mientras yo no estuve, pateó él y no hay motivos para sacarle los penales. Lo que sí estamos cambiando es que yo pateo un poco más los tiros al touch y el drop. Pero no es cuestión de venir y sacarle eso por chapa.
