El presidente de nuestra institución comparte unas palabras para con sus socios
El Lunes 12 de agosto quedará en nuestra memoria como una fecha difícil de olvidar
Después de una semana trágica para la ciudad de Rosario, dos noticias, casi simultáneas, conmovieron a familiares, amigos y socios de nuestro Club. Luisina Contribunale y nuestro ex–Presidente Alejandro Risler ya no estarán entre nosotros
Nos podríamos hacer mil preguntas que seguramente no tendrán respuestas, por lo tanto es muy probable que tampoco encontremos consuelo. Y como siempre ocurre, se oyen voces que dicen: “a pesar de todo, la vida sigue”. Para los que sufren la pérdida de un ser querido se oirá: “la vida sigue, pero ya nada es igual”
Ante esto aparece toda una comunidad que se moviliza, se solidariza y acompaña también con tristeza
Dentro del deporte de Plaza ocurrió algo que también nos ha conmovido. La reacción de nuestros jóvenes deportistas que se ofrecieron de voluntarios para ayudar en la catástrofe ocurrida en Salta y Oroño. Además, por unanimidad, se decidió no participar en ninguna competencia deportiva, en adhesión al duelo, cueste lo que cueste
No creo en las casualidades, y les confieso que me sorprendí al leer en La Nación del Miércoles 14 lo que expresaba el Papa Francisco (se dirigía a jugadores de fútbol, pero hace referencia en la nota, que lo hace extensivo a todos los deportes)
“Les pido que vivan el deporte como un don de Dios, como una oportunidad para hacer fructíferos sus talentos, pero también como una responsabilidad. Queridos jugadores, quisiera recordarles especialmente que, con su modo de comportarse, tanto en el campo como fuera de él, en la vida, son un referente. Aunque no se den cuenta, para tantas personas que los miran con admiración, son un modelo, para bien o para mal. Sean, por tanto, conscientes de esto y den ejemplo de lealtad, respeto y altruismo. Mientras que algunos tendrán que reflexionar sobre lo dicho”. En nuestro Club, ésto se transformó en una filosofía de vida
Alejandro fue un PILAR en la cancha y en la vida. Luchó incansable hasta lo inimaginable por sus ideales, hasta el último día. Su pasión por el Rugby y por nuestro Club seguramente agotaron sus reservas, pero aún así y conociendo su estado siguió y continuó bregando por hacer un Plaza glorioso
Jugador destacado de la primera de nuestro Club, seleccionado de todo lo que se podía en esos años: URR, Interior y Puma, entrenador, Secretario de URBA, Tesorero y Presidente de la UAR, Presidente de Plaza, y gran impulsor de muchas obras vitales para nuestro Club (Cancha sintética de hockey, museo, etc.)
Esta foja impecable nos inspira a todos a dar lo mejor de cada uno. Nos quedamos con su legado de fuerza más allá de sus dificultades. Se fue un hombre del Rugby que además trabajó para el Hockey, Tenis y Cricket, pero fundamentalmente se fue un hombre de bien, esperemos que su ejemplo y compromiso sea una guía para nosotros y las futuras generaciones de nuestro Club
Sabemos que no hay palabras que puedan aportar consuelo a sus familias, solo sepan que no están solos, somos un Club y su gente que los acompaña con mucho cariño y dolor
Marcelo Dip
Presidente
Club Atlético del Rosario
